¡El casting no es para mí!

Hace unos cuantos años vi en el Teatro El Nacional la obra “A chorus line”, una comedia musical sobre un casting de bailarines para integrar la fila del coro. Era una experiencia terrible para todos aquellos que participaban y además… eran cientos los que se postulaban!!!. Recuerdo sobre todo la escena final cuando el coreógrafo hace la última selección. Tenían que quedar 8 nada más. Entonces comienza a dar los nombres de los que debían dar un paso al frente, los bailarines daban ese paso con toda la ilusión reflejada en sus rostros, con el pensamiento de “por fin lo conseguí”, “lo logré”, “se me tenía que dar”, y luego de un silencio mortal la voz del coreógrafo dice: “Primera fila muchas gracias”. ¡¡¡Que HDP!!! No podía hacer eso tan cruel.
En esa época lejos estaba de mi pensamiento la loca idea de algún día presentarme a un casting.


Sólo en tres oportunidades hice algo así.

Casting Nª 1

No me acuerdo con precisión en qué año fue que me presenté para CATS, el famosísimo musical de Andrew Lloyd Weber.

La verdad es que en esos momentos no tenía una gran formación como para presentarme a la audición… pero bue… lo hice. Sabía desde el vamos que yo de bailar nada de nada, pero tal vez para el coro podría quedar.
¿Saben dónde de hacía la selección? ¡¡¡En el GRAN REX!!! ¡Guau! Ya no me importaba en lo más mínimo si no quedaba porque al menos me iba a dar el gusto de cantar en ese escenario.
Había que cantar un tema de comedia musical. Como había tanta gente tuve tiempo de relajarme hasta que me tocara el turno de subir al escenario. Pude escuchar a varios, algunos podían cantar el tema completo y a otros después de la primera estrofa les decían “Muchas gracias!”. Cuando llegó mi momento canté “Tonight” de AMOR SIN BARRERAS. También me dijeron “muchas gracias” pero al menos pude cantar el tema completo. Asi que… yo canté en el Gran Rex también, che!

Casting Nª2
La segunda vez fui un poco más confiado. La obra era “Los miserables”. Había visto el espectáculo en Broadway y me maravilló. Sabía con certeza que en ese show tenía cabida porque NO TENÍA QUE BAILAR!!! Jajajaja
La prueba se realizaba en el Club GEBA de la calle Bartolomé Mitre. Como siempre los casting se hacen a partir de las 10 de la mañana, una guachada para un cantante, así que para tener la voz en condiciones me levanté a las 5 de la mañana y a las 6:30 empecé a vocalizar. Mis vecinos estarían contentísimos.
Llegué temprano, como es mi costumbre, pero ya había muchísima gente, asi que a esperar.
Lo que tenía de especial para mí esta audición es que entre los que tomaban la prueba había gente de la productora de Broadway.
Después de esperar durante 3 horas, nos dicen que debido a que había tantos postulantes deberíamos volver al día siguiente a la misma hora.
Nooooooooo!!! Otra vez levantarme a las 5 de la mañana para vocalizar!!!!
Al día siguiente, recuerdo que era sábado, llego tempranito otra vez, pero esta vez ya éramos menos.
Después de pasar 4 o 5 postulantes llegó mi turno.
Cuando entré al salón, parecía un bar en refacciones, le doy la partitura al pianista, digo mi nombre como pedían y comienzo a cantar. Aquí también canté “Tonight”, me encanta esa canción, y también en esta ocasión pude cantar el tema completo. Me hacen esperar unos segundos interminables al terminar la canción y me dicen: “muchas gracias”.
A los pocos días recibo un llamado de la producción del show mediante el cual me citaban para la semana siguiente para una segunda prueba. Previamente tenía que pasar por las oficinas a retirar unas partituras.
La segunda prueba era en el Teatro Opera. Guau! Un nuevo escenario para pisar y disfrutar.
No éramos muchos para la audición y por suerte el horario era por la tarde.
Teníamos que esperar en el hall del teatro hasta que nos llamaran para entrar en la sala y subir al escenario. Llegó mi turno. Me aterré. Mi garganta se secó y la sentía cerrada. Me sentí acobardado porque tenía que cantar en el escenario pero de espaldas a la platea porque habían ubicado una mesa para la gente de la producción en el centro del escenario. Canté pésimamente. Estoy seguro que de haber estado estas personas en la platea como es lo habitual me hubiese sentido más cómodo y lo habría hecho mejor.
En fin… también puedo decir que canté en el Teatro Opera! Jajajaja

Casting Nª 3
Fue hace pocos días. Me anoté para “El joven Frankenstein” para el doble rol del Inspector Kent/Ciego. Había que bajar de internet dos escenas y una partitura.
La audición se realizaría en el Paseo La Plaza en la Sala Pablo Neruda.
Y otra vez a las 10 de la mañana. A levantarse temprano.
Tenía toda una semana para aprenderme la canción y las escenas, además había que presentarse con el look que uno se imagina para el personaje que audiciona. Y además con zapatos de baile de jazz o tap (solo para los que se presentaban para el rol del monstruo).
Mmmmm me parecía demasiado para mí. Comenté con mis seres queridos que no me iba a presentar. Casi me matan! “Cómo que no te vas a presentar?”, “Tenés que ir”, “Es una oportunidad”. Todo el mundo me presionaba. El único que me dijo “yo te acompaño” fue mi amigo Hernán., ese gesto me dio un poco más de confianza. Allá vamos.
Llego al lugar media hora antes. Estaba todo muy bien organizado. Ese día se presentaban los postulantes para tres personajes: Igor, el monstruo y el Inspector/Ciego.
La mayoría de los que allí estaban audicionarían para Igor. Era muy gracioso ver a tanta gente disfrazada como el personaje que hizo célebre y en forma tan graciosa Martin Feldman. Había unas 15 personas para el rol del Monstruo y otras 20 para el Inspector.

La prueba constaba de varias partes. La primera era subir al escenario y presentarse. Allí evaluaban la aptitud física para el rol, si pasabas esa parte dabas la prueba de canto, luego la de actuación y finalmente la de danza.
Llegó mi turno de subir al escenario. Lo hice como “el ciego”, dije mi nombre y el rol para el que me presentaba. Ricky Pashkus, que tomaba las audiciones, me dijo
-Que voz de locutor!.
-Soy locutor.
-Vendeme el espectáculo como el personaje.
No entendí la pauta y lo hice como un locutor normal, luego entendí y traté de hacerlo como el ciego.
¡¡¡No pasé la primera prueba!!!
Me quedé con las ganas de cantar la canción al menos!!! Uuuuuufaaaaaaaa!!!
Y pensar que me salía tan linda.

Como no he tenido mucha suerte en los castings decidí preparar un show con temas de comedia musical. Me quiero dar el gusto de cantar todos los temas que tanto me gustan de este género tan maravilloso.